BERLÍN, Alemania.- En esa mística que tienen los nuevos ciclos pienso en conceptos como la renovación. Renovar es una palabra que, de acuerdo a su origen en latín renovāre, significa hacer algo desde cero. Hacerlo de nuevo. Rehabilitar, reconstruir, remozar, reanudar, retomar, reemprender, proseguir, son algunos sinónimos. Traigo la renovación a cuento porque este es mi tercer invierno en Berlín y migrar nos exige un constante estado de reinicio.
Al filósofo Miguel de Unamuno se le atribuye la frase “el progreso consiste en renovarse”y la voz popular se encargó de convertirla en “renovarse o morir”. Yo, en esta mi primera entrega, propongo lo contrario: renovarse sin morir. Existir suave. Sin pararse, pero sin correr.