Por Jing Wei / RFA en mandarín
China ha pedido a México que “acelere” la investigación sobre la muerte de ocho de sus nacionales en el naufragio de una embarcación, poniendo de relieve los peligros a los que se enfrentan decenas de miles de chinos que han viajado a la frontera entre México y Estados Unidos en busca de asilo político en los últimos años.
“La embajada china en México… ha pedido a la parte mexicana que acelere la investigación sobre el incidente y ha enviado un grupo de trabajo al lugar del suceso“, declaró el martes (2 de abril ya en China) el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, en una rueda de prensa celebrada en Pekín, añadiendo que China está prestando “mucha atención” al incidente.
Ocho ciudadanos chinos fueron hallados muertos tras una “situación migratoria” frente a las costas del Istmo de Tehuantepec, informó la Fiscalía General del estado mexicano de Oaxaca en un comunicado publicado en su página web el 30 de marzo.
“La Fiscalía de Oaxaca (…) estableció que se trataba de personas procedentes de China, siete mujeres y un hombre“, decía el comunicado, citando a un superviviente que afirmaba que las víctimas habían viajado el 29 de marzo a bordo de una embarcación procedente de Tapachula, en el estado de Chiapas, cuando volcó.
Los ocho cadáveres fueron hallados cerca de Playa Vicente, en el istmo, y las autoridades locales están trabajando con funcionarios de la embajada china para identificar a las víctimas.
Wang dijo que la embajada “está en estrecho contacto con la parte mexicana para seguir verificando la información de los fallecidos y proporcionar asistencia al ciudadano chino superviviente“.
En los 12 meses transcurridos hasta el 30 de septiembre de 2023, más de 24.000 ciudadanos chinos siguieron una de las varias arduas y a veces peligrosas rutas de contrabando de personas a través de Sudamérica y Centroamérica para cruzar la frontera desde México y solicitar asilo político en Estados Unidos.
Las rutas incluyen a veces un peligroso viaje a través del mar en una pequeña embarcación.
“Nunca lo olvidaré mientras viva“, dijo el emigrante Li Kai a RFA Mandarín en una entrevista reciente sobre la travesía marítima que hizo con su familia. “Fue muy peligroso“.
“El barco era pequeño, de fibra de vidrio, lo que lo hacía especialmente vulnerable a las impredecibles condiciones del mar y del tiempo en el Caribe“, dijo Li. “Sentí un abrumador sentimiento de culpa por poner a mis hijos en semejante peligro porque yo me había metido en problemas en China“.
El relato de Li también sugería que las muertes de Oaxaca no eran las primeras entre los emigrantes chinos que hacían el viaje a Estados Unidos.
“Oí que uno de estos barcos había volcado y que la gente se había ahogado“, dijo Li en una entrevista grabada semanas antes de la tragedia del 29 de marzo.
Movimiento “run“
Conocido en China como el movimiento “run“, utilizando un carácter chino que suena parecido a la palabra inglesa “run”, la ola migratoria tiene sus raíces en el descontento generalizado con el totalitarismo político y el estancamiento económico bajo el gobierno del líder del Partido Comunista Chino, Xi Jinping.
Despegó tras la atenuación, en diciembre de 2022, de los agotadores encierros, del encarcelamiento masivo en campos de cuarentena y de las pruebas obligatorias de la política de cero COVID, que duró tres años.
Un antiguo emigrante que tomó la ruta a través de México, conocida en chino como “caminar por la línea “, dijo que la ruta es conocida por sus peligros.
“Siempre ha sido peligrosa“, dijo, comparando la oleada migratoria desde China con la huida de los animales antes de un gran terremoto.
“Antes de un gran terremoto, siempre hay señales, como todos los animales que huyen“, dijo, sugiriendo que China padecerá un futuro de agitación económica y política.
“Ahora mismo, se avecina un gran terremoto, es la única forma en que puedo explicarlo”.
Probable vía de evasión
Jie Lijian, activista del Partido de la Democracia China con sede en California, que asiste regularmente a solicitantes de asilo chinos cuando llegan a Estados Unidos, dijo que el último accidente no se produjo en una “línea” bien conocida hacia Estados Unidos, y que la ruta probablemente se había tomado para evadir las patrullas marítimas en rutas más conocidas.
“Tomarán rutas a través de tramos más amplios de mar con olas más grandes como atajo para la ruta terrestre“, dijo Jie a la RFA en una entrevista reciente.
“El mar puede ser peligroso e impredecible, pero si vas por ahí, puedes evitar muchas inspecciones fronterizas, la amenaza de deportación, las elevadas tasas y las bandas de ladrones privados (que se aprovechan de los emigrantes)“, afirmó Jie.
Es probable que el número de chinos que buscan la ruta hacia la frontera estadounidense se haya visto impulsado por las promesas de los traficantes de personas que ensalzan las ventajas de la vida en Estados Unidos.
El año pasado, la plataforma de vídeos Tik Tok fue testigo de la aparición de hashtags y videos en los que se enseñaba a los ciudadanos chinos que huían del país cómo navegar por América Latina, además de ayudarles con los entresijos burocráticos de establecerse en Estados Unidos mientras presentaban una solicitud de asilo político.
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