“Evaluamos diseño y arquitectura del aeropuerto Felipe Ángeles, no su funcionalidad”: Premio Versalles

El Premio Versalles da legitimidad a proyectos como el AIFA, pero sólo se evaluó el diseño no su funcionalidad, reconoció el secretario general del galardón.
AIFA: Foto: Premio Versalles

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BRUSELAS, Bélgica.- El Premio Versalles de arquitectura y diseño anunció el pasado 30 de septiembre la selección del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) como uno de los “más bellos del mundo”. 

De inmediato, el recién estrenado gobierno de Claudia Sheinbaum -y ella misma- presumió que el AIFA, tan cuestionado por su sobrecosto e ineficacia, había sido galardonado por ese “prestigioso” premio internacional. 

“¡Miren nada más que sorpresa!, ¿no? Tanto que decían del Felipe Ángeles, del AIFA, qué terrible aeropuerto, que se hubiera realizado el de Texcoco. Bueno, todas las críticas que recibió, a ver ahora qué digan todos ellos del premio internacional que recibió como uno de los aeropuertos o una de las arquitecturas más bellas del mundo”, retó la presidenta a la oposición en su conferencia de prensa del pasado 7 de octubre.

En entrevista telefónica desde su sede en la ciudad de Versalles (oeste de París), Jérôme Gouadain, el secretario general del Premio Versalles, explica que el galardón toma en cuenta la arquitectura y el diseño, y no la funcionalidad del proyecto, ante las críticas que desató entre la oposición al gobierno.

“Adquirió una intensidad particular, una intensidad ‘a la mexicana’, y quedamos atrapados en un debate totalmente político”, señala Jérôme Gouadain.

El Premio Versalles, con sede en Francia, es un galardón mundial que reconoce anualmente lo mejor en arquitectura y diseño en aeropuertos, campus, estaciones, recintos deportivos, museos, comercios, hoteles y restaurantes. El AIFA está entre los seis finalistas, y el próximo 2 de diciembre se anunciará al ganador de la máxima distinción en la sede de la UNESCO en París.

Jérôme Gouadain se deslinda de cualquier instrumentalización política que se haga del premio en México (“nosotros somos neutrales”). Pero al mismo tiempo elogia lo que en términos de inversión y arquitectura representa el Felipe Ángeles (“es un aeropuerto ambicioso que enaltece a México”).

-¿Cómo funciona el proceso de selección del Premio Versalles?

Nuestro departamento artístico hace un seguimiento de los proyectos nuevos o recientes de las distintas categorías a lo largo del año, incluidos los aeropuertos. El departamento evalúa todos los proyectos que podrían ganar el premio. No recibimos candidaturas. Somos nosotros los que evaluamos el mercado mundial. Después, el departamento artístico envía al comité de selección una lista corta. Una vez que el comité ha elegido a los seis finalistas, la secretaría del Premio Versalleshace pública la lista. En ese momento se informa a los ganadores, es decir, a los gobiernos o a los propietarios privados, pero en ningún caso ellos participan en el proceso de selección.

-En el sitio oficial del premio se convoca a la inscripción de proyectos…

Abrimos el proceso para que la gente pueda proponer proyectos, pero es complementario al trabajo que hace el departamento artístico. Eso es más útil para las categorías de proyectos pequeños, como restaurantes y hoteles, que pueden pasar por alto en nuestro monitoreo del mercado (…) Para los aeropuertos no necesitamos eso, porque el mercado es conocido y no hay infinidad de proyectos cada año. El mercado es limitado.

Jérôme Gouadain, secretario general del Premio Versalles. Foto: Premio Versalles.

-¿Entre cuántos aeropuertos fueron seleccionaron los seis finalistas?

No puedo darle una cifra exacta. Creo que son menos de cien. Hay aeropuertos grandes y hemos incluido algunos aeropuertos pequeños en el pasado, pero la tendencia es tener cosas bastante homogéneas. Es decir, es difícil comparar un aeropuerto con 70 millones de pasajeros con otro que tiene 100 mil. Pero nos ha pasado. De hecho, no trabajamos en función del tamaño del aeropuerto. A veces hay aeropuertos que tienen una identidad muy fuerte. Estoy pensando en un aeropuerto en Nueva Zelanda que fue preseleccionado por el comité aunque no era enorme.

Yo sé que el aeropuerto Felipe Ángeles no es el más importante de la lista, pero es un proyecto con una inversión muy considerable y desde un punto de vista arquitectónico y de diseño tiene sus cualidades. Soy muy consciente de toda la oposición que generó (en México). Recibimos muchos comentarios sobre el Felipe Ángeles. Estuvimos atrapados en un torbellino. Pero eso no cambia nada para nosotros. Somos neutrales en esta historia. (…) De hecho, el comité no podría proponer el proyecto si no tuviera cierta credibilidad. Sé que internamente, en México, hay muchas críticas, pero sigue siendo una obra importante con una inversión muy fuerte (75,000 millones de pesos en construcción) y que destaca desde el punto de vista arquitectónico y de diseño.

-¿Los miembros del Comité visitaron el Felipe Ángeles?

Tenemos informantes por todas partes. Así que no es necesario que todo el comité visite el lugar, porque eso sería además muy complicado desde el punto de vista logístico, pero obtenemos información sobre el terreno. Tenemos gente presente por todas partes que nos da su opinión. Así que todos los lugares de la lista han sido visitados.

-¿El gobierno mexicano fue parte de sus informantes locales?

No, porque no tenemos ningún contacto previo con este. Sólo avisamos una vez tomada la decisión. El gobierno no fue informado de que íbamos a incluir el aeropuerto en la lista, no lo sabía, se enteró en el último momento. Para nosotros es importante que el comité sea muy libre a la hora de tomar sus decisiones, para que no haya posibles influencias. Del mismo modo, los nombres de los jueces de la segunda fase, es decir, el Jurado Mundial, sólo se darán a conocer al final del concurso para evitar cualquier posible interferencia. El proceso se ha perfeccionado para que sea extremadamente neutral e imparcial.

-¿Del grupo de seis aeropuertos saldrá entonces un sólo ganador?

Sí. Pero la selección ya es importante porque, de hecho, sólo se eligen seis. Por eso ya calificamos como ganadores a los proyectos que entran en la preselección. Es como estar nominado a un Oscar, ya es muy importante. Después, el Jurado Mundial concederá otros tres premios, incluido el Premio Versalles, que es la máxima distinción.

-El Felipe Ángeles fue inaugurado comercialmente el 21 de marzo de 2022. ¿Por qué fue incluido hasta el concurso de 2024?

En proyectos muy grandes, como los aeropuertos, tenemos cierta flexibilidad, lo que significa que no tomamos necesariamente una inauguración del año anterior. En cualquier caso, no tomamos ninguna inauguración después del 31 de diciembre de 2023. Después, hay cierto margen. Por ejemplo, la Terminal 2 del aeropuerto de Changi (Singapur) se inauguró varias veces. Podía perfectamente haberse incluido en la edición de 2023, pero se optó por incluirlo en esta última.

Cuando se trata de aeropuertos es muy común que haya varias inauguraciones para el mismo edificio, porque cada gobierno quiere hacer la suya, por lo que puede inaugurar partes del mismo. Rara vez se entrega todo de una vez. El aeropuerto Felipe Ángeles fue un proyecto que se realizó rápidamente, porque hemos tenido otros que llevaban diez años de retraso. (En este caso) creo que hay aspectos políticos en los que no estamos involucrados y que no nos afectan de la misma manera. En México está pasando algo bastante radical en términos de expresión, pero hay que guardar la objetividad de nuestro lado. 

-Entonces, ustedes han seguido las reacciones en México tras el anuncio del premio…

Sí, recibimos bastantes comentarios. Seguimos lo que ocurre en los medios de comunicación, en las redes sociales, etcétera, y podemos ver cómo se discuten las cosas.

-¿Y qué opina?

Creo que es un debate meramente político, porque si nos fijamos en la infraestructura en sí, ésta es muy importante, y estés a favor o en contra, no importa, el aeropuerto existe. El comité de selección redactó el texto que aparece en el comunicado de prensa que anuncia los finalistas. Hay algunos puntos arquitectónicamente significativos que menciona. Y eso no se tiene en cuenta (en la discusión). Además, el proyecto se ha realizado en un plazo relativamente corto. Eso también es digno de elogio.

-Se ha criticado mucho en México la funcionalidad y utilidad del Felipe Ángeles…

Ese tipo de controversias son bastante comunes cuando se trata de infraestructuras, especialmente en las democracias. Se me ocurren varios ejemplos en Australia y Estados Unidos. Cuando un gobierno construye una infraestructura, la oposición obviamente va a denunciar el proyecto, y eso forma parte del juego democrático. Nosotros, en el Premio Versalles, vamos después de todo eso. Y a veces, como resultado, aportamos una legitimidad o legitimamos un proyecto. Ese no es nuestro objetivo, pero resulta que la distinción que estamos concediendo legitima el proyecto. Y eso va a alimentar aún más la polémica. Hemos visto esto en diferentes lugares.

-El punto es la utilización política del premio para probar que la construcción del Felipe Ángeles fue una decisión correcta. Usted me dice que conocían la polémica detrás del aeropuerto y decidieron así dar de todas formas su reconocimiento.

Sí, porque nosotros no entramos en el juego político, somos neutrales. El papel delPremio Versalles es garantizar que se reconozcan los proyectos más exitosos desde el punto de vista de la arquitectura y el diseño, es decir, obviamente no nos pronunciamos sobre la funcionalidad (…) Puede que el aeropuerto esté mal comunicado, pero ese es un problema habitual en cualquier infraestructura, ya sea un aeropuerto o incluso una estación de tren. Pero nosotros no vamos a hacer comentarios al respecto. No tenemos opinión al respecto. Nuestro enfoque es principalmente estético y cultural.


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