La automatización de los procesos de trabajo generará en México un aumento rápido de su productividad económica de 2.8 por ciento anual entre 2023 y 2040, pero si además se utilizan sistemas de inteligencia artificial generativa (AI Gen, por su sigla en inglés), ese crecimiento alcanzará 3.4 por ciento, estima un análisis de la consultora internacional McKinsey & Company.
Expuso que los beneficios de implementar este tipo de innovación serán mayores para México respecto a otras economías emergentes como India o Sudáfrica, cuyos incrementos en la productividad serán de 3.1 y 2.9 por ciento, respectivamente; en tanto que China los superaría con 3.6 por ciento.
La AI Gen es un nuevo y revolucionario sistema tecnológico que crea contenidos de texto, audio o imagen a partir de algoritmos avanzados que responden a órdenes o comandos. Esta herramienta es capaz de realizar tareas repetitivas o administrar enormes cantidades de datos que permitan aligerar la carga de trabajo de una parte considerable de la fuerza laboral.
Un estudio de McKinsey arrojó que en 2012, los “trabajadores del conocimiento” (quienes toman decisiones con datos e información que reciben) pasaban un día de su semana laboral buscando y reuniendo ese material.
En 2017, otra investigación de la consultora encontró que la mitad de todos los trabajadores evaluados dedicaban tiempo a actividades que podrían ser automatizadas adaptando la tecnología que había en esa época.
Basados en el resultado de entrevistas a 100 expertos en la materia y un análisis de sus propias estadísticas, la consultora con sede en Nueva York señaló que el despliegue de IA Gen en las empresas “podría ayudar a acelerar el crecimiento de la productividad”, pues sus capacidades “amplían enormemente el conjunto de actividades laborales con potencial de automatización técnica”.
McKinsey estima que la implementación de esta tecnología dentro de los procesos industriales agregaría a la economía internacional entre 2.6 y 4.4 trillones de dólares anuales.
Actividades en peligro
La AI Gen traerá un reacomodo en la estructura funcional de las empresas y es que una de sus consecuencias será que “un número significativo de trabajadores tendrá que cambiar sustancialmente la actividad que realiza, ya sea en su ocupación actual o en otra nueva”.
Un reciente informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) concluyó que 27 por ciento de los trabajos en los países que la conforman, entre ellos México, “se encuentran en ocupaciones con alto riesgo de automatización”.
Pero el “impacto” sobre toda la cadena de otras inteligencias artificiales no generativas, permitiría añadir a la economía un monto adicional de entre 11 y 17.7 trillones de dólares.
En particular, se espera un significativo “impacto” en las empresas TMT (tecnología, medios y entretenimiento y telecomunicaciones), ya que este tipo de inteligencia artificial podría “liberar” entre 380 y 690 mil millones de dólares, principalmente en el rubro de “alta tecnología”.
A nivel de funcionamiento interno de las empresas, 70 por ciento del “impacto” lo concentrarán cuatro áreas: atención al cliente, mercadotecnia y ventas, ingeniería de software y desarrollo.
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